octubre 06, 2008

Sistema Político - USA

Vaya que actualmente no debemos de perder de vista lo que ha sucedido y está pasando, más lo que vendrá en los Estados Unidos de América, por ello, consideramos propicio hacer mención de su sistema político, el cual hay que entenderlo como el conjunto de instituciones, fuerzas, estructuras, relaciones, grupos y procesos, por los cuales y a través de, se genera, distribuye, usa y modifica el poder público en una sociedad y fase histórica determinadas[1], de hecho, podemos observar que el Estado Norteamericano estableció en su Constitución Política dichos ideales, entre ellos, determinó que el ejercicio del Supremo Poder se distribuye en torno a tres poderes independientes, orgánicamente separados unos de otros, en donde cada uno es elegido de manera distinta, cada uno capaz de supervisar y regular a los otros y estos son la base de su sistema de cheks and balances (controles y equilibrios).

Por lo que hace a las entidades federativas, cada una cuenta con una constitución propia, división de poderes y amplio margen de autonomía política y administrativa derivadas del federalismo que impera en el país.[2]

En sus 219 años de vigencia, el sistema político de los Estados Unidos de América ha conocido una estabilidad casi permanente a lo largo de su historia, en donde el Poder Ejecutivo está encabezado por el Presidente quien es jefe de Estado y jefe de Gobierno y junto con el vicepresidente, es elegido en elecciones cada cuatro años[3] y puede ser reelegido una sola vez.

En el texto original de la Constitución no se mencionaba nada sobre la reelección pero era costumbre que a nadie se eligiera más de dos veces, hasta que se estableció la enmienda XXII en 1947, aplicable a partir de 1951 que dispone que ninguna persona podrá ser electa más de dos veces para el cargo de Presidente. [4]

El vicepresidente actúa como sustituto inmediato de éste en caso de ausencia total debida a remoción, muerte o renuncia. Generalmente los candidatos a presidente eligen a su compañero de fórmula, decisión que debe ser ratificada por la Convención Nacional de su partido. Histórica y políticamente quien ocupa este cargo, no obstante ser el Presidente del Senado (sin posibilidad de voto, salvo en caso de empate), carece de relevancia en el contexto nacional.

El Poder Legislativo[5] es bicameral toda vez que se integra por el Senado o Cámara Alta y la Cámara de Representantes o Cámara baja. La primera de ellas, está compuesta por 100 miembros electos por los Estados de la Federación, para un mandato de seis años y pueden ser reelectos de forma ilimitada. Cada estado elige dos representantes al Senado, sin tomar en cuenta el tamaño de su territorio o el número de habitantes y se renueva por tercios.

Por lo que hace a la Cámara Baja, ésta cuenta con 435 curules que se eligen mediante sufragio universal. Para esta elección el país se divide en igual número de distritos electorales conforme a un criterio poblacional. El encargo de los representantes es de dos años y se pueden reelegir ilimitadamente y se renueva en su totalidad cada dos años, a menos que existan bajas de algunos de sus miembros, en cuyo caso se pueden presentar elecciones especiales para cubrir las vacantes conocidas como by-elections.

El Poder Judicial[6] se depositará en un Tribunal Supremo y en los tribunales inferiores que el Congreso instituya (al menos uno en cada estado). Los jueces federales son nombrados en forma vitalicia por el Presidente con la aprobación del Senado, siempre y cuando observen buena conducta.

Expuestas las generalidades del sistema político norteamericanos, pasaremos a esbozar en otra entrada en este blog, lo relativo al procedimiento que se lleva a cabo para elegir al titular del Poder Ejecutivo... mientras, no olvides postear tu opinión.


[1] KAPLAN, Marcos en Diccionario Jurídico Mexicano, Ed. Porrúa y Universidad Nacional Autónoma de México, México, 2005, págs. 3483-3485.
[2] Cfr. AGUIRRE, Pedro, Sistemas Políticos y Electorales Contemporáneos: Estados Unidos, Instituto Federal Electoral, México, 2001, pág. 15.
[3] Artículo Dos de la Constitución de los Estados Unidos de América.
[4] Cfr. SIRVENT GUTIÉRREZ, Consuelo, Sistemas Jurídicos Contemporáneos, Ed. Porrúa, México, 2004, pág. 110.
[5] Artículo Uno de la Constitución de los Estados Unidos de América.
[6] Artículo Tres de la Constitución de los Estados Unidos de América.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Bloomberg, el alcalde de New York, quiere que se cambie la ley para postularse por un tercer mandato.

Su razón: "se necesita experiencia en momentos de crisis"... cualquier simiitud con los dictadores de AL, MERA GENETICA POLÍTICA.

BVC dijo...

Yo creo que de todos los países se pueden tomar las cosas buenas, Estados Unidos de Norteamerica a demostrado tener bases firmes encuanto al aspecto constitucional es un país totalmente federal sus estados son autonomos, la verdad ese proceso de división de poderes, su autonomía federal les ha funcionado, en el caso de México deberiamos tal vez tomar aquello que en primer lugar nos pudiera aplicar y en segundo lugar funcionar, siempre debemos estar atentos como país de tomar lo mejor de los otros y no modelos económicios, financieros, políticos que no van con nuestra realidad e indosincracia.